Baja California, 31 de mayo de 2025.- En plena temporada seca, expertos ambientales lanzaron un enérgico llamado a la población para redoblar esfuerzos en la prevención de incendios forestales, advirtiendo que gran parte de estos siniestros tienen origen en descuidos humanos que pueden evitarse con acciones simples pero contundentes.
El ingeniero bioquímico José Carmelo Zavala Álvarez, reconocido ambientalista y especialista en gestión ambiental, advirtió que la región atraviesa la etapa más riesgosa del año en lo que respecta a incendios forestales, conocida como la temporada “Mayo-octubre”, caracterizada por altas temperaturas y baja humedad.
“Estamos en plena temporada de incendios. La prevención del descuido es fundamental. Esta es una etapa crítica en la que debemos estar muy atentos”, afirmó Zavala, destacando que la vegetación seca como el acate y los arbustos se convierten en material altamente combustible, propenso a arder con cualquier chispa.
Zavala recordó el devastador incendio que a principios de este año arrasó con cientos de viviendas en la zona de Los Ángeles, Estados Unidos, comenzando como un incendio forestal que rápidamente se propagó hacia zonas residenciales. “Fue una tragedia con pérdidas millonarias y también humanas. Si eso no nos pone en alerta, no sé qué más podría hacerlo”, advirtió.
El especialista señaló en entrevista con N+Tijuana, que muchas de las emergencias podrían evitarse con acciones básicas como no tirar colillas de cigarro encendidas, apagar completamente las fogatas y evitar encender fuego cuando hay viento. También subrayó la importancia de mantener despejados los alrededores de las viviendas, retirando hierba seca y otros materiales inflamables.
Los incendios no solo destruyen bosques y hábitats naturales, también afectan seriamente la calidad del aire. “El hollín y los materiales tóxicos que se liberan durante un incendio pueden viajar kilómetros y representar un riesgo para la salud humana”, alertó.
Carmelo Zavala reiteró que la prevención debe ser una prioridad colectiva. “Es un asunto de responsabilidad compartida. Cada persona puede hacer la diferencia evitando acciones que desencadenen incendios”, concluyó.
La alerta está dada: prevenir está en nuestras manos.